En el mundo de la carpintería metálica, pocas cuestiones generan tanta confusión como la idea de que el aluminio “suda” y el PVC no. En realidad, tal y como le podemos confirmar desde Aluminios Prado, ambos materiales pueden presentar condensación bajo determinadas condiciones, aunque su comportamiento térmico es muy distinto. Para que no vuelva a tener dudas al respecto, nuestros especialistas en trabajos de aluminio y PVC en A Coruña aclaran en este artículo las dudas más comunes, de forma que pueda elegir con criterio el material más adecuado para su vivienda.
Por qué el aluminio se puede condensar más
El aluminio es un material excelente en términos de resistencia y durabilidad, pero también es un gran conductor térmico. Esto significa que transmite con rapidez el frío o el calor del exterior hacia el interior de la vivienda. El caso es que, cuando se produce una diferencia notable de temperatura entre ambos ambientes, y el aire interior contiene humedad, es habitual que aparezcan gotas de agua en el marco o en el cristal.
Este fenómeno, conocido como condensación, se acentúa si la estancia tiene poca ventilación o si las ventanas presentan puentes térmicos. No obstante, actualmente existen soluciones que minimizan este efecto, como las ventanas de aluminio con rotura de puente térmico (RPT), que mejoran de forma significativa el aislamiento y reducen la transmisión de temperatura.
El comportamiento del PVC frente a la condensación
A diferencia del aluminio, el PVC no es conductor. Su capacidad aislante es hasta mil veces superior, evitando que el frío o el calor atraviesen el marco con facilidad. Por eso, en condiciones normales, las ventanas de PVC no presentan condensación visible en el marco, aunque el cristal aún pueda empañarse si hay exceso de humedad o ventilación insuficiente.
No obstante, desde Aluminios Prado entendemos que conviene aclarar que el PVC no elimina la condensación, sino que la reduce al mínimo y evita que afecte a la estructura de la ventana.
PVC y aluminio: separando mitos de realidad
Decir que “el aluminio suda y el PVC no” es simplificar demasiado. La realidad es otra y se resume en que ambos materiales pueden registrar condensación en el vidrio, pero el aluminio tiende a mostrarla también en el marco debido a su alta conductividad. La diferencia real no está en “sudar o no sudar”, sino en la capacidad de aislamiento que ofrece cada uno.
Tecnología avanzada y mucha precisión para nuestras ventanas en A Coruña
Aunque entendemos que el tema de que “suden” o no sea algo preocupante a la hora de hacer la elección, nuestros especialistas en ventanas de PVC y de aluminio en A Coruña prefieren que no sea así. Por eso trabajamos con maquinaria de última generación y un proceso automatizado que permite reducir errores y optimizar los resultados, ofreciendo ventanas nuevas con un excelente rendimiento térmico.
¿Busca mejorar el aislamiento y evitar problemas de condensación en su hogar? Entonces se lo ponemos muy fácil: solo tiene que contactar con nosotros desde aquí.